Celebrar una década a estas alturas es un recorrido lleno de aciertos y errores, de grandes momentos y difíciles pruebas. Una década pasa volando si es tan intensa como la historia del TJ Arte y Rock Café, iniciada en Marzo de 2007 en la Calle Sexta de Tijuana.
Un bodegón de dos pisos casi en la esquina de Negrete, en medio de negocios diversos y casi alejado de la Revolución y de los bares de la calle vecina, fue un detonante inicial sin esperarlo o proponerlo para que la calle también conocida como Flores Magón reviviera en pleno la vida nocturna en los siguientes meses. Una barra, sillones, mesas y un poco a poco más adaptable escenario, fue testigo de los esfuerzos de José Luis Sánchez y sus entonces socios de tener un lugar que fuera en realidad, un encuentro de la cultura y el entretenimiento a diferencia de otros fallidos intentos en otros lados. Talleres, presentaciones de obras de teatro, performances, semanas temáticas y actividades similares tuvieron un público cautivo cada semana. Semanas como las de Pink Floyd, Led Zeppelin, La Noche De La Luna y más, reflejaron que la noche y la fiesta son para celebrarse en Tijuana con cultura y junto a espacios como El Dragón Rojo, Café Revolver y El Burro Rayado, impulsaron el trabajo de muchos personajes en la danza, el teatro, la música, la poesía. Por ejemplo, ahí esta lo que hizo en el TJ, Metamorfosis Teatro, de donde emergió la raíz del trabajo cada vez más sólido de Voyage Teatro con Hamlet Rubio, también el de Paco Mufote, entre otros. También, varios artistas plásticos, jóvenes o con experiencia, vieron plasmada su obra en la pared del TJ.
El primer TJ era como aquella serie Cheers, el lugar donde todos saben tu nombre y se hizo una comunidad de amigos y de ahi salieron personajes como Panchito y sus historias, Manuelito el Crítico De Rock, Lucifer y otros que hicimos del TJ, un hogar en sus dos pisos. Aquí se marcó toda una generación de bandas locales que tomaron por asalto aquel escenario, a algunos los catapulto a lugares mejores, otros siguieron creciendo y otros, fueron nombres efímeros. Entre ellos, recordemos a Revival 71, Torno, Nosis, Vaqueros Galácticos, Cicuta, Bajo Kontrol, Ruido Blanco, Ak-Ceso, El Teacher Del Rock, Los Dandys Del Sur, Daedra, Plata, Los Helldandys, Ruok, Mentes, Los Extraños Hijos Del Profe, Lluvia De Fuego, Vachteria, Black Jewel, Dead Rabbits, Limerance, Bisoteria, Steel Legacy, Ejido Mike, Sueño Stereo y muchos más.
También en su escenario, pasaron varios nombres con peso y que algunos de ellos, aun son protagonistas de la escena actual y otros, van a esa misma ruta, sin olvidar a quienes son cimientos, nombres sólidos como: Bye Sami, La Cruz De Tijuana, Ginny Silva, Carla Morrison, San Pedro El Cortez, Daniel Dennis y Javier Batiz. En medio de esto, llego una necesaria evolución para el TJ, su segunda etapa, ya que el tiempo de lugar de conciertos para menores se extinguió en los lugares y era tiempo de darle ese giro a un bar rockero, acorde a la movida nocturna que era la Sexta. Esto no estuvo exento de cambios y movimientos, pero permitió la idea de expandir el local, hacer un escenario más presentable, abrir un segundo baño y ampliar la capacidad y seguridad. Esto permitió que se dieran firmar de autógrafos con Paul DiAnno, Saratoga, (sin olvidar a Cage) y la presencia de bandas del circuito de punk, metal y demás internacional y nacional como Terrible Feelings, Night Nurse, Bird Mad Girl, Kohosh, The Insurgence y más. Además de las importantes visitas de dos bandas nacionales mexicanas, Los Dug Dug´s y Transmetal, además de los españoles Dragonfly.
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