La música en México ha evolucionado de una pasión cultural a un negocio floreciente que conecta a millones de personas. Este creciente interés se traduce en un aumento de asistencia a conciertos y en el consumo de contenido digital, posicionando a México como un mercado clave en América Latina.
Con esta expansión, la demanda por formación en producción musical también ha crecido, atrayendo no solo a jóvenes, sino a personas de la Generación X que desean profesionalizar su amor por la música. Ante esta necesidad, instituciones como la Universidad AMERIKE ofrecen programas especializados, liderados por figuras destacadas como Icautli Cortés, productor nominado al Grammy, quien asegura que la tecnología actual permite crear estudios caseros de alta calidad. Según el reconocido productor, la digitalización ha democratizado el acceso a herramientas avanzadas, facilitando el camino para nuevos talentos.
La Licenciatura en Producción Musical en AMERIKE va más allá de la técnica, enfocándose en el desarrollo creativo y en la adaptación a las tendencias globales. Cortés enfatiza el papel de la inteligencia artificial, que, aunque no sustituye la creatividad humana, permite optimizar los procesos creativos. Además, el programa incluye áreas emergentes, como la música para cine y videojuegos, sectores con un gran potencial de crecimiento en México y dominados en gran parte por países europeos. Con proyectos como la sala de scoring en Estudio Churubusco, AMERIKE impulsa a México como un semillero de talento con formación avanzada y visión global, capaz de llevar su riqueza cultural al mercado internacional.
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